8/11/09

La teoría de la manta corta

feliz   

Corrían los años ´60 cuando Delem popularizó una “teoría futbolera”, una metáfora, que comparaba a algunos equipos con una manta corta, y que decía que si la manta es corta y te tapás los pies, se te destapa la cabeza y si te querés tapar la cabeza se te descubren los pies. Hoy Boca pareció encajar en esa teoría.

   Nos visitó el equipo que tenía al comenzar la fecha la delantera más goleadora del torneo y la segunda mejor defensa. Hasta ahora a Boca le habían convertido goles en 11 de las 12 fechas jugadas y había convertido goles también en 11 de las 12 fechas. El equipo más goleador del torneo no solo no convirtió goles sino que generó una sola jugada de riesgo en todo el partido y fue a los ´38 del segundo tiempo. Boca mantuvo el arco en cero. Buena noticia. Por el otro lado generamos muy poco peligro para ser que fue el equipo que más buscó ganar el partido. El equipo que convirtió goles en casi todos los partidos quedó en cero. Mala noticia.

    Se jugaba mucho Boca. Ni más ni menos que seguir manteniendo viva la quimera de cuanto menos entrar a la próxima Libertadores. Y eso se vio en el partido. Hubo un equipo que quiso y no pudo, Boca, y otro que se conformaba con poco y apostaba a algún error del rival para llevarse todo, cosa que no sucedió, Colón.

   El partido fue chato, friccionado, aburrido. Un primer tiempo para el olvido, donde los dos se anularon mutuamente. Solo una acción individual de Gaitán que tiró un sombrero sobre el arquero y la pelota fue al techo del arco, quedó como acción para el recuerdo. En el segundo Boca salió más decidido. Con más movilidad del Pocho, más llegada por los laterales y más compromiso de Medel en ataque. Se generaron algunas situaciones de gol, se generaron dos penales que el árbitro ignoró olímpicamente, pero no alcanzó ni por asomo para llevarnos los tres puntos.

   Lo más destacable de cara al futuro sucedió atrás. Muy sólido desempeño de la dupla paraguaya Cáceres-Morel, que borró del campo a dos goleadores de la talla de Fuertes-Nieto. También Ibarra por un lado y Krupo por el otro hicieron un excelente trabajo defensivo (no así en ataque). Bien Rosada, bien Pochi y Gaitán lo mejor en ofensiva. Los reemplazos no aportaron demasiado. Algo de la movilidad de siempre en Mouche que reemplazó a Gaitán y la misma nada de siempre de Marino que ingresó por el Pocho Insúa, ¿que hada misteriosa a bendecido a Marino para que se siga poniendo la camiseta de Boca pese a su habitual entrega cercana a cero (deberá mejorar para llegar a cero)?.

    Preparamos la fiestita, homenajeamos a los cumpleañeros Martín y Sebastián (¡¡¡Idolos!!!), hubo globos, hubo cotillón, pero el cumple nos salió medio tristón…..

No hay comentarios:

Publicar un comentario